El pecado…
La falla, el error, el desatino, es un muro interior que destruye, que hace que el cuerpo proteste y las consecuencias son muchas, entre ellas la enfermedad, temporal o crónica.
El pecado es el desafío de un orden interior contra uno mismo.
Especies de pecado
La vanidad es un vacío, una soledad interior.
La envidia, es la úlcera del alma.
El rencor, es el orgullo desmedido.
La soberbia, nos margina de los demás.
La lujuria, busca el desgaste.
La murmuración, es como sepultarse en el desierto.
El adulterio, causa la muerte del hijo.
La gula, es la falta de control, de disciplina en sí mismo.
La avaricia, nos hace fallar contra la caridad.
Para adoptar el cambio de hábitos que nos destruyen, debemos tener:
Instantes de reflexión.
Cortos ayunos.
Momentos de meditación y,
Observar las maravillas de Dios, en la naturaleza.
¡Contemplar a Dios!
Fr. Edmundo Silvia
Sigue 3ª entrega:
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