Memorias, solo eso...

DIOS ME DIO, NO SOLO LA VIDA…III

También a Bill Alardyce, mi jefe, Helen, mi subjefe y amiga,

 y Alma, mi protectora. Ellos dieron a mis aspiraciones de estudiante 

respaldo y ayuda a toda necesidad. Ellos me motivaron con su respeto

 a mi condición de persona joven y vulnerable, en un país de tanto peligro 

para personas solitarias.

Allí, finalmente Alice Scrobe, quien tomó mi cargo, 

en la Bolsa de Nueva York, antes de que yo 

regresara a Colombia.

Además hubo ángeles  en el entorno, como Carola Vargas 

y Bertilda Torres, que cobijaron mis anhelos; 

de una u otra forma me prodigaron techo; como me llevaban 

tantos años me hacían sentir segura. La primera, 

contemporánea con mi hermana mayor 

y la segunda, con mi madre.

"No todo lo que brilla es oro",
ni todo lo que vemos es...
un oso.
Dibujo de Isabela

En mi vida no solo me rodearon 

ángeles que protegieran 

mis diferentes estados 

de joven señorita. 

Aparecieron...   

–lobos con piel de oveja- 

de quienes hube de huir, pues,

 “de todo hay en la viña del Señor”.

Es responsabilidad de cada quien, 

decidir qué hace con su –albedrío- 

proveído y respetado, 

por Dios Padre.

¡No a la guerra y al aborto!