lunes, 30 de junio de 2014

Escuela para padres VI

El que peca y reza, empata.
El que quiere a Adán, quiere a Rebadán.
El que quiere celeste, que le cueste.
El que quiere marrones, que aguante tirones.
El que rompe paga y se queda con los tiestos.
El que se casa, tiene casa y costalito pa´ la plaza.
El que tiene rabo de paja, no se arrime a la candela.
El que trabaja no come paja, ni bebe agua como un buey.
El que vive en el peligro, en él perecerá.
El tiempo perdido, los santos lo lloran.
El tonto no ve más allá de la nariz.
El tuerto entre los ciegos es rey.
En boca cerrada no entran moscas.

domingo, 29 de junio de 2014

Escuela para padres V

El que comiendo canta, juicio le falta.
El que compra lo que no necesita, termina vendiendo lo que ha de menester.
El que con lo ajeno se viste, en la calle lo desvisten.
El que con niño se acuesta, cantado amanece.
El que cuida perro ajeno, pierde el pan y pierde el perro.
El que espera, desespera, y esperando se queda.
El que guarda comida, guarda pesares.
1912-1998-2014
Muy de acuerdo con la cita:
“Los andrajosos y desarrapados y sucios lo son en el alma
antes de serlo en el cuerpo”. Rodolfo Waldo Triné
El que inocentemente peca, inocentemente se condena.
El que la hace la paga.
El que llega saluda y el que se va se despide.
El que mucho abarca, poco aprieta.
El que mucho habla, mucho yerra.
El que no ha visto a Dios, cuando lo ve se asusta.
El que no llora no mama, aunque esté al píe de la mama.

sábado, 28 de junio de 2014

Escuela para padres IV

El frío conoce al desnudo.
El hábito no hace al monje, sino la sangre.
El hierro se trabaja caliente.
El hombre hace a la mujer, y la mujer forma  al marido.
El hombre propone y la mujer dispone.
El muerto al hoyo y el vivo al bollo.
El pecado, acobarda.
"El que a buen árbol se arrima, buena sombra le cobija".
El perezoso trabaja doble.
El que a lo alto escupe, a la cara le cae.
El que a yerro mata, a yerro muere. 
El que anda entre la miel, algo se le ha de prender.
El que anda entre lobos a aullar  aprende

El que bien anda, bien acaba.

viernes, 27 de junio de 2014

Escuela para padres III

“Pedagogía” de mi madre en nuestro diario vivir… 
Cada uno de quienes los oimos, si los entendimos, los aplicamos, 
según el caso y circunstancia.
 Cuentos de Domingo Siete.
 Dejémonos de arar y comámonos los bueyes.
 Dejémoslo en 45…
 Del ahogado al sombrero.
 Desde que las disculpas vinieron, todo el mundo queda bien.
 Después de comer o beber, ni un parrafito leer.
 Después de la borrasca, viene la calma.
 Después del ojo afuera, no hay santa Lucía qué valga.
 Dime con quien andas y te diré quien eres.
Dios los hizo y ellos se juntan
 Dime de qué presumes y te diré de qué adoleces.
  Dios no desampara a nadie.
 Dos cabezas piensan más que una.
 Echando a pique, se aprende.
 El color no hace al sabor.
 El consejero no es el que pierde, sino el que lo recibe.
 El cura predica y no se lo aplica.
 El dedo malo en todo tropieza.
 El enfermo, carga al sano.

jueves, 26 de junio de 2014

Escuela para padres II

Los eufemismos, términos de uso frecuente, no siempre son decorosos; 
son expresiones que suenan duras y malsonantes, 
socialmente hablando.

El uso de los eufemismos a veces obedece a causas emotivas de miedo, exageración, emoción, delicadeza, autoridad y decencia, 
también para dar por explicado un tema, de forma clausurativa o enfática.
Son similares al adagio, aforismo, axioma, dicho, proverbio y refrán. 
Todo para enriquecer el idioma, aunque suene como lenguaje coloquial -. Personalmente los denomino “filosofía popular” y los comparto en mi blog.
 Aquí, algunos de los vocablos, con los cuales mi madre, complementó parte de la lingüística familiar para orientar a los hijos y nietos, sin mayor explicación, ni  ambigüedad.
"Cuando se educa una mujer, se educa una familia".


Camarón que se duerme, se lo lleva la corriente.
Cambiar pan por mogolla.
Caras vemos corazones no sabemos.
Cayó como anillo al dedo.
Cayó como pedrada en ojo tuerto.
Claridad de la calle, oscuridad de la casa.
Como cuido lo mío, cuido lo ajeno.
Con la vara que midas, seréis medido.
                                    Cuando la enfermera vino, ya el chino cortaba leña.                                      Cuando la pata se hincha, la sepultura relincha.
Cuando uno menos piensa, salta la liebre.
Cuatro ojos ven más que dos.
Cuentas claras, chocolate espeso.
La tala de árboles sigue perjudicando el 
Planeta.














miércoles, 25 de junio de 2014

Escuela para padres

 I
Citas, adagios, refranes y dichos, “pedagogía” que aplicó mi madre
en lo cotidiano de nuestras vidas
& A barca abierta, el justo peca.
& A buey manso no hay que torearlo.
& A caballo regalao, no se le mira colmillo.
& A caldo hervido, sabor ido.
& A Dios rezando y con el mazo dando.
& A dos señores no se les puede servir.
& Agua que nos has de beber, déjala correr.
& Aguacero recio, pronto escampa.
& A la tierra que fueres, haz lo que vieres.
& A mal que no tiene cura, hacerle la cara dura.                                
"Árbol que crece torcido, jamás su tronco endereza"
& A mal tiempo, buena cara.
& A nadie le gusta mirarse en el espejo.
& A nadie le gusta ver su retrato.
& A palabras necias, oídos sordos.
& A quejarse al mono de la pila.
& A quien feo ama, bonito le parece.
& A trancas que a mochas.
& A un necio no hay que porfiarle.
& Al amigo y al caballo, no hay que cansarlo.
& Al bagazo poco caso y al cagajón mucha atención.
Con la oportunidad que Dios me da para reparar mis fallas,
reconocimiento póstumo.
Al margen:
Aportes de mi hijo Santiago
 y mi hermana Blanca.

domingo, 8 de junio de 2014

GRATITUD de un tiempo ido

Gracias Señor por darme lo necesario
Gracias por mi familia y las personas que me rodearon,
de quienes aprendí cosas buenas.
Gracias por la salud, el bienestar y las alegrías, también
 las tribulaciones, dolores y sufrimientos.
Con humildad te digo gracias, Señor por tu amor.
Perdona mis pecados, por no ayudar al que necesitaba.
Perdona mi orgullo, egoísmo, por no disculparme ante quien ofendí.
Perdón por no aceptar las dificultades.
Por dejarme llevar de las trivialidades.
Perdóname por no guardar respeto por el entorno,
Incluso, la Naturaleza.
HOY, Señor! 
Confiado en tu amor misericordioso te pido
fortalecer mi fe, hazme dócil y lléname de esperanza.
Dame Señor sabiduría, guía mis pasos y por favor,
que no falta el sustento en mi casa y familia.
Ilumíname cómo puedo extender tu Reino*.
Dejo toda mi vida de nuevo en tus manos.
Concédeme llevarTe en mi corazón y con tu Gracia,
se haga tu presencia.
Obra en mí tu voluntad con el Pentecostes
de tu Luz de amor.
Recopilación de autor desconocido.
*Gracias! Señor, obraste en mí, Pentecostes.